Gracias infinitas, a todas las personas que han pasado por este 'Jardín', mientras descansaba, dejaban sus comentarios, sus ánimos, su cariño, que tanto bien me han aportado y que siempre tiran de la cuerda cuando necesita que esté más tensa.
Un abrazo a cada una de ellas, iré poco a poco aterrizando y visitando vuestros rincones.
El Duende os deja los mejores deseos para este otoño, y para las amigas de otra latitud, una primavera resplandeciente.